Utilizando tecnología propia, creamos plantas de tratamiento de agua contenerizadas Plug&Play, basadas en tratamientos biológicos y de adsorción, con menores costes operativos y de inversión, evitando la generación de rechazos concentrados a diferencia de las tecnologías de membrana.
BIOBOX nace fruto de un intenso esfuerzo en I+D+i y sobre la base de la experiencia y lecciones aprendidas por dos empresas referentes en el sector. Ingeobras y Filtralite (Saint-Gobain) han combinado sus conocimientos en tratamientos de agua, ingeniería y digitalización para desarrollar un sistema con un enfoque disruptivo frente a la clásica solución en contenedor. El objetivo se basa en crear plantas compactas de tratamiento de agua totalmente automatizadas capaces de resolver las limitaciones de estas soluciones tradicionales; altos costes de proceso o rechazos de contaminantes concentrados difíciles de gestionar.
Ingeobras trabaja desde 2005 desarrollando soluciones estratégicas de ingeniería de agua. La compañía introdujo un enfoque intensivo en I+D en el año 2014, desarrollando tecnologías innovadoras propias de tratamiento de aguas basadas en los materiales fabricados por Filtralite®. Por su parte, Filtralite® es la línea de medios filtrantes fabricados a base de arcilla expandida por la multinacional Saint – Gobain, en su planta industrial de arcillas expandida en Raelingen, Noruega.
Ambas empresas llevan años realizando proyectos conjuntos y estudiando cómo tratar cada problema desde su fundamento teórico en el laboratorio hasta alcanzar una solución factible, en costes de proceso e inversión, a escala industrial.
La tecnología BIOBOX se ha implementado para abordar 9 tipos de contaminantes presentes en agua potable, agua residual urbana y agua industrial.

El diseño de BIOBOX se basa en la aplicabilidad técnica, la rentabilidad y la sostenibilidad de la planta como factores clave. “Los sistemas son modulares y es posible escalar la solución para tratar diferentes caudales y concentraciones de contaminantes. También pueden funcionar en combinación con infraestructuras existentes, optimizándolas, potenciando su capacidad o actuando como tratamiento terciario”. Afirma Carlos de Juan (Product Manager de Filtralite Iberia y Latam)
Para tratamientos de aguas con matrices de contaminantes combinadas es posible construir plantas ad-hoc. Estas plantas son capaces de integrar diferentes soluciones BIOBOX en un único contenedor o en dos contenedores operando en serie con las tecnologías BIOBOX separadas. Asimismo, para medios y grandes caudales se diseñan soluciones modulares que operan en paralelo a partir de la misma fuente de alimentación.
El intenso trabajo de innovación y desarrollo ha logrado poner al alcance de todo tipo de empresas tecnología muy avanzada. Hasta la fecha sólo disponible para grandes plantas e inversores. El enfoque de BIOBOX pasa por optimizar diseños para reducir el espacio requerido, los costes inversión asociados y el coste por m3 tratado.
Con estas tecnologías reducimos el consumo energético, el uso de reactivos y minimizamos la generación de rechazos, creando procesos limpios y seguros para el medioambiente.
BIOBOX es una solución de rápida construcción que es capaz de adaptarse a lugares de difícil acceso o condiciones climáticas extremas. “Detectamos la necesidad, especialmente en aguas industriales y de pequeños y medianos municipios, de desarrollar soluciones en contenedor. Esto se debe al requerimiento de reducir al máximo el tiempo de ejecución, minimizando espacio y costes de inversión. Nuestra experiencia en el diseño de plantas de obra civil y los impresionantes resultados que ya nos daban nuestras plantas compactas, fueron el punto de partida para esta línea de negocio”. Dice Joaquín Murría (CEO de Ingeobras)
Los sistemas ofertados están completamente automatizados, con gestión remoto on-line y con capacidad de autogestión.
La planta se monitoriza mediante una tecnología de sensores. De esta forma, se garantiza la máxima operación de los recursos y se facilita la gestión con una intervención mínima del personal operativo. Además, esta medición en continuo de los parámetros clave en los procesos de tratamiento de agua permite obtener una visión indicativa de cómo está funcionando en todo momento. Por ejemplo, gracias a la sensorización es posible ajustar la utilización de consumibles a lo estrictamente necesario, con flexibilidad para absorber cambios y fluctuaciones.
Todos los datos de operación y parámetros monitorizados en proceso son registrados tanto a nivel local, en formato memoria, como a nivel virtual en servidor. Se puede visualizar en tiempo real y en histórico desde cualquier dispositivo con conexión a internet. A esta visualización pueden acceder varios usuarios de forma simultánea desde cualquier parte del mundo.
Gracias a la automatización se tiene un control absoluto de la instalación. Es una solución muy cómoda para el usuario final ya que va complementado con un servicio de avisos y alarmas. Las alertas llegan vía mensajería de forma directa al dispositivo móvil. Se reduce considerablemente el tiempo de reacción por parte del personal operativo ante cualquier situación.
En conclusión, esta interesante propuesta tecnológica de BIOBOX abre nuevas oportunidades para aquellos usuarios finales o proveedores de servicios en búsqueda de soluciones alternativas de tratamiento y plantas de tratamiento de agua contenerizadas de tipo “plug&play”, para resolver problemas de muy diversa índole, con bajo CAPEX y OPEX.
Palabras clave del artículo: Lanzamiento de BIOBOX®, plantas de tratamiento de agua contenerizadas , Agua potable, Aguas residuales, Reutilización del agua.